martes, julio 25, 2006

Reloj de Ideas



Noche otra vez.
Amada-odiada noche, como siempre.

Otra vez la atracción extraña (y bastante absurda) hacia la noche, me hace gozar de los mas bajos delirios.

Que adictiva balada de luces, ¿no crees?
Sí estubieras aquí seguramente te gustaría. (Que estupideces escribo)



Mejor cambiamos el tema.

¿Sabes? he estado pensando en el tiempo.
En los recuerdos.
En lo que fuí.
En lo que fuiste.
En lo que se perdió.
En lo que no se tubo y ahora no se sabe manejar.

¿Cuanto tiempo pasó para que todo cambiara?
¿Cuanto tiempo paso para que todo volviera a ser igual?
_____________________________________________(¿Nada?)
-Corrijamos ese todo, por favor.

...



Las heridas nunca dejaron de arder. Ni siquiera cuando no tube rastros de tí, ni siquiera cuando había perdido las esperanzas.

¿Porque entonces hoy (que las neblinas se acaban) no estoy conforme?
¿Porque no puedo guardar todo esto como un bonito momento? (supongo que en parte no fue malo)
¿Porque hubiera preferido NUNCA saber que en una imperceptible porción lo mismo que sentiste hizo explotar el basurero?

Por que una estupida voz inutil me advierte que las heridas se pueden volver a abrir.

~Liter?~ I don't know.




Cuando te vayas apaga la luz.



Si no, mejor.

1 comentario:

Lipton tea can do that! dijo...

eramos amigos de niños
y te extrañe años!
lastima, no?